Terre d'Avoine, la Tierra de la Avena, es el enclave emblemático de A-DERMA situado en el corazón de la región del Tarn. Encarna la extensa experiencia de la marca, desde los granos de avena Rhealba® hasta la piel.
En esta tierra nutritiva, lejos de cualquier fuente de contaminación, cultivamos el grano de nuestro activo vegetal, la avena Rhealba®, según los principios de la agricultura ecológica y la agroecología, siguiendo las prácticas más respetuosas con el terreno, la naturaleza y la biodiversidad.
De este grano nacerán las futuras plántulas de Avena Rhealba®, cuyo extracto está presente en todos nuestros productos.
Puesto que somos los únicos en cultivar la avena Rhealba®, producimos nuestras propias semillas aquí en Terre d'Avoine (la Tierra de la Avena), lo que nos permite garantizar el origen, la trazabilidad y la calidad constante.
Terre D'Avoine (la tierra de la avena) también está en el centro de nuestra cadena de suministro corta: A 50 km en línea recta se encuentran los distintos centros de Pierre Fabre que participan en la fabricación de nuestros productos.
Esto es beneficioso tanto para el medioambiente como para las mujeres y los hombres que trabajan en la zona.
de las semillas de avena Rhealba® se producen en Terre d'Avoine (la tierra de la avena)
de parcelas de cultivo ecológico
Especies de flores e insectos registrados en Terre d'Avoine (la tierra de la avena)
Las colmenas contribuyen a la polinización del lugar y de los alrededores
Con Terre d'Avoine (la tierra de la avena), A-DERMA se compromete con la protección y la mejora del medioambiente y la preservación de la biodiversidad, a través de su colaboración con la Ligue de Protection des Oiseaux (L.P.O) firmada en 2015.
Terre d'Avoine, la Tierra de la Avena, es un santuario oficial y se compromete a ayudar a preservar las aves y a mantener y desarrollar la naturaleza y la biodiversidad.
El resultado de estos compromisos se concreta en los registros de biodiversidad que realiza periódicamente la LPO. Sabemos, por ejemplo, que en 2019 y 2020 se alojaron en Terre d'Avoine 119 especies de flores e insectos y 55 especies de aves* y mariposas, así como abejas solitarias, auténticos marcadores naturales de la biodiversidad.
*Fuente: LPO
