Pequeñas heridas, quemaduras, golpes, ¡sucede de todo durante nuestra vida! Pero, afortunadamente, solo de vez en cuando. ¡No es de extrañar que circulen las ideas más descabelladas sobre las cicatrices! Pero si quiere evitar las marcas duraderas, aquí tiene cuatro conceptos erróneos que debe olvidar, ¡para que por fin descubra la verdad!
¿La consabida costrita que tanto nos alegra ver aparecer mientras nos felicitamos por curarnos bien? En realidad, no es tan agradable porque una costra no es necesaria para la curación. De hecho, ocurre lo contrario: una piel menos flexible no puede cerrarse correctamente para evitar las cicatrices.
Bien, entonces, ¿cómo lo evitamos? ¡Respuesta en la siguiente pregunta!
El secado al aire libre es bueno para la ropa, ¡no para nuestras cicatrices! A la piel le gusta que la cuiden creando un entorno húmedo y limpio. Lo ideal es utilizar una crema cicatrizante para ayudar a hidratar la zona y evitar la formación de costras. También puedes protegerla aplicando un apósito estéril. Ayudará a que se cure bien.
Una pequeña rutina para la piel nueva:
Olvidémonos del agua de mar.
No, gracias, sol. En el grupo de factores que empeoran las cicatrices, ¡está a la cabeza! ¿Por qué es tan perjudicial? Porque la luz UV sobre la piel inflamada (roja) provoca hiperpigmentación (manchas oscuras).
Lo correcto, como puede imaginar, es evitar la exposición. ¿No es fácil? Entonces lo mejor es cubrir la cicatriz lo antes posible o utilizar una crema solar con SPF 50+ adecuada para pieles frágiles o una crema de protección solar y cicatrizante 2 en 1.
